Negocios con la BdP: “Las personas de escasos recursos tienen necesidades y éstas pueden ser cubiertas”

María López Escorial. Consultora especialista en microfinanzas y negocios en la base de la pirámide.

“La pobreza es un problema complejo porque atañe a múltiples factores: educación, salud, energía… Por lo tanto necesitamos tener a todos los agentes sociales para solucionarlo” apunta María López Escorial, consultora especialista en microfinanzas y negocios en la base de la pirámide (BdP). Desde hace unos 50 o 60 años se han producido avances para acabar con la pobreza, siendo las ONGs y los gobiernos los actores tradicionales a la hora de atajarlo. Pero estos esfuerzos no son suficientes pues hoy en día hay 2’7 billones de personas que sobreviven con dos dólares al día o menos, de ahí que López Escorial insista en la importancia del papel de las empresas para mitigar esta problemática. “La empresa tiene 3 ventajas, es capaz de atraer capital de forma sostenible, normalmente si es exitoso pueden alcanzar escala y emplean a un número importante de gente, la eficiencia está dentro de sus objetivos y con los incentivos adecuados la empresa es eficaz sobre todo si el objetivo social está dentro de su misión” argumenta la docente.

Y, ¿cómo pueden contribuir las empresas? Haciendo negocios con la base de la pirámide, “las microfinanzas nos enseñaron que las personas de escasos recursos tienen necesidades y éstas pueden ser cubiertas. Las personas de bajos recursos pueden pagar y además pagan bien, una vez que les das oportunidades ellos responden”. De este modo, al mismo tiempo que las empresas obtienen beneficios, generan además impacto social, “se pueden crear industrias con la BdP y pueden ser rentables” señala María López Escorial. Con todo aclara que “la necesidad financiera no es la única necesidad de los pobres sino que hay más – alimentación, energía, housing o salud- y podemos darles oportunidades” y añade, “se trata de ofrecer mejores productos, adecuados a sus necesidades pero generar lo suficiente para que la empresa sea rentable”.

“Para tener éxito en la base de la pirámide aunque sea una oportunidad no es fácil y tiene unos principios a seguir: escuchar y entender a los clientes –cómo viven, qué necesitan-, hacerlo con escala, una propuesta de valor extremadamente asequible, distribución en la última milla, innovación continua, transformar el mercado y atraer capital humano para atraer inversores” explica la docente.

Y para entender de un modo más práctico todas estas ideas, el desarrollo de negocios con la base de la pirámide como estrategia de Responsabilidad Social Empresarial, María López Escorial finaliza la sesión analizando el caso de Danimal, lanzamiento de un yogurt especial para población en la base de la pirámide de Danone en Sudáfrica. “Tenemos un producto con claros beneficios sociales. El impacto social es clave pero el retorno económico es necesario” advierte.

Laura Muiño

Periodista y alumna del Curso de Especialización en Responsabilidad e Innovación Social de la Cátedra Inditex-UDC