Julio González García
Catedrático de Derecho Administrativo. Universidad Complutense de Madrid (UCM)
Julio González García. La importancia de la sociedad en las universidades, y viceversa
“La modernización de las universidades españolas requiere de una voluntad de máximo consenso entre las administraciones, los colectivos universitarios y los agentes sociales y económicos”. Así comienza el documento Estrategia Universidad 2015. El camino para la modernización de la universidad, editado por el Ministerio de Educación en junio de 2010 y citado por Julio González García, catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad Complutense de Madrid, en la sesión del Posgrado en RS de la Cátedra Inditex de Responsabilidad Social de la UDC que él mismo impartió el pasado jueves 23 de febrero. La conclusión de la jornada, sin embargo, se hizo eco del “lento proceso” que supone la renovación del sistema de gobierno universitario y del tradicionalismo de la estructura actual. “A la hora de movernos somos unos dinosaurios”, reconocieron tanto el docente como otros miembros de la comunidad universitaria presentes en el aula.
Ante el organigrama teórico de un equipo, cualquiera, de gobierno universitario, la elaboración y ejecución de presupuestos brindaron a la sesión un elevado grado de participación. “Está claro que los presupuestos –controlados por el Ejecutivo autonómico- tienen ideología”, apuntó un alumno. “¿Son entonces las universidades brazos armados, o centros de investigación y desarrollo?”, cuestionó un segundo.
La respuesta, que no única, la acercó González recordando su experiencia como secretario general de la Complutense. “La actividad de la universidad es esencialmente crítica. El espíritu crítico es esencial. Pero lo cierto es que la universidad pública es también un centro de poder, gracias en parte al respeto que le otorgan los ciudadanos”, explicó.
Y del presupuesto anual, a la esencia de la universidad. “La universidad es docencia e investigación, no todo puede basarse en pagar nóminas. No queremos que la universidad sea un mero centro de enseñanza. No se puede disociar investigación de enseñanza”, argumentó el catedrático. Pero el contenido del debate, académico, fue más allá. El papel de la sociedad y del alumnado cobraron también relevancia en la sesión. La existencia de un déficit de carácter recíproco entre sociedad y universidad en lo que a la petición de trabajo se refiere hace, concluyeron docente y alumnos, que la responsabilidad social universitaria se tambalee. Algo similar con otro de los grupos de interés de la institución académica. “¿Dónde está el papel de los estudiantes en todo esto?”, cuestionó uno de los alumnos señalando el organigrama de la pizarra. “Es necesario cambiar la cultura social de las universidades”, apostilló una de sus compañeras. “La cultura de la calidad”, matizó González.
Aida Mosquera
Periodista y alumna del Posgrado en RS de la Cátedra Inditex de Responsabilidad Social de la UDC.