«El proyecto de aprendizaje-servicio del CESIS te permite trabajar en un ambiente profesional con tu equipo»
Claudia Rodríguez. Alumna de la IX edición del Curso de Especialización en Sostenibilidad e Innovación Social de la Cátedra Inditex-UDC de Sostenibilidad. Cofundadora de Alén – Soluciones en Economía Circular y sostenibilidad.
Claudia Rodríguez buscaba un proyecto que reorientase su carrera hacia un sector de mayor dinamismo e impacto y encontró en las sesiones sobre economía circular del CESIS la motivación para poner en marcha su propósito “de mayor calado”. Considera que el Curso es “una oportunidad única para entrar en contacto con personas de perfiles diversos e inquietudes similares” y para descubrir “una visión compartida” con la que emprender “un proyecto común”.
PREGUNTA: Ingeniería Química con especialización en Bioquímica, Máster en Negocios Europeos… ¿Cómo acaba una ingeniera química realizando el Curso de Especialización en Sostenibilidad e Innovación Social?
RESPUESTA: Pues fue una evolución muy natural y orgánica. Creo mucho en el aprendizaje continuo y en reinventarse continuamente. Estudié Ingeniería Química en Madrid y, aunque la carrera me encantó, no veía mi encaje trabajando como ingeniera y reorienté mi carrera con el Máster en Negocios. Eso me permitió trabajar en puestos de control de gestión muy cerca del negocio y del área comercial en el sector retail y en cosmética, tanto en Estados Unidos como en España, pero llegó un momento en el que quería reorientar mi carrera, buscar un área más dinámica y con más impacto que tuviese recorrido a largo plazo y, sobre todo, que me permitiese trabajar con más motivación, con un propósito de mayor calado.
La integración de la sostenibilidad y la economía circular como ventajas competitivas de las organizaciones es la misión de Alén. Imagino que el CESIS ha tenido algo que ver en el desarrollo de su nuevo proyecto profesional.
Mucho. No solo por la especialización que supone el CESIS a nivel formativo, sino sobre todo por el valor añadido que más valoro personalmente, que es la red de contactos que supone. Las tres socias de Alén nos conocimos a través del CESIS: Iria era alumna como yo y Ana, la profesora de la sesión sobre economía circular, así que el CESIS ha sido fundamental en el proyecto. Con muchos de nuestros compañeros hemos colaborado dentro de Alén y tenemos una relación muy cercana sobre todo con nuestro equipo del proyecto [de aprendizaje-servicio]. El CESIS es una oportunidad única para entrar en contacto con personas de inquietudes similares, pero con perfiles y experiencias muy diversas, experiencias internacionales, diferentes niveles de seniority…
La importancia del networking con docentes, compañeros de edición y alumni, al fin y al cabo.
Así es. El CESIS nos ha dado muchas herramientas y contactos que han enriquecido el proyecto, pero sobre todo ha sido el lugar donde entramos en contacto y vimos que teníamos una visión compartida, que podíamos emprender con un proyecto común. Nosotras somos una cooperativa, y eso también es fundamental para el proyecto, esa coherencia tanto en el fondo como en la forma.
Entiendo que el carácter eminentemente práctico del CESIS va precisamente por ahí: la relación entre profesionales con interés en el ámbito de la sostenibilidad sumada al desarrollo de los proyectos de aprendizaje-servicio en colaboración con diferentes organizaciones.
Mi experiencia es que el nivel del cuadro docente y de los alumnos es muy alto, multidisciplinar y combinando diferentes niveles de experiencia. Te encuentras con profesionales que vienen del mundo empresarial, pero también con emprendedores, investigadores con perfil académico, recién licenciados o personas que han desarrollado su carrera en el ámbito de la economía social, tanto en España como a nivel internacional… Es de verdad una oportunidad única en el sentido de que es difícil entrar en contacto con perfiles tan diversos, de forma presencial y con inquietudes compartidas en torno a la sostenibilidad.
El proyecto de aprendizaje-servicio te permite no solo aterrizar los conceptos teóricos en un caso práctico, sino también trabajar en un ambiente profesional con tu equipo, que en mi caso fue una experiencia extraordinaria tanto a nivel personal como profesional. Por ejemplo, en mi equipo yo aportaba la visión más analítica, pero contábamos con una emprendedora del sector de moda sostenible, una experta en cadena de suministro textil, un perfil muy fuerte en impacto ambiental, un experto en logística y un perfil especializado en ecommerce, lo que me permitió aprender mucho con un nivel de exigencia alto y en un ambiente colaborativo.
Innovación social, buen gobierno, transparencia y rendición de cuentas, medio ambiente, financiación, I+D+i, evaluación y mejora continua… ¿Cuál de los módulos formativos del CESIS diría que ha aportado más a su iniciativa de emprendimiento?
Lo relacionado con economía circular ha sido clave, pero la verdad es que casi todos los módulos añaden algo al proyecto [Alén]. El hecho de que los módulos sean complementarios y que los perfiles de los profesores sean tan diversos enriquece mucho la experiencia y permite que salgas con una visión de 360 grados, que es clave en nuestro proyecto. Por ejemplo, aunque nosotras estamos especializadas en Economía Circular, en ocasiones acompañamos a los clientes que necesitan asentar los cimientos de su estrategia de sostenibilidad a través del mapeo de grupos de interés o el análisis de sus asuntos materiales.
Es la responsable de gestión analítica de su empresa. ¿En qué consiste concretamente su labor en el ámbito de una consultoría en materia de sostenibilidad?
La verdad es que, en Alén, como muchas emprendedoras, llevamos muchos sombreros. En los proyectos de sostenibilidad muchas veces me encargo de la parte de gestión del proyecto y de la parte de análisis y tratamiento de datos. Somos un equipo muy complementario y muy colaborativo, por lo que no nos cerramos en compartimentos estancos. De ahí que la visión de 360 grados sea tan importante.
Hablando de transversalidad, ¿considera que tanto empresas como administraciones públicas y organizaciones del tercer sector integran en sus procesos la sostenibilidad a lo largo de toda su cadena de valor?
Hay mucha diversidad. Nosotras trabajamos sobre todo con pequeñas y medianas empresas y con ayuntamientos pequeños, y lo que vemos es que hay mucha voluntad de hacer cosas, de hacerlas bien y con impacto. En ocasiones, las iniciativas son poco estratégicas, muy centradas en un evento o en un proyecto, pero responden a la voluntad de empleados y gestores de cambiar la forma en la que opera la entidad. Otras veces, hay organizaciones donde ya están trabajando en muchos frentes, pero de forma caótica, sobre todo cuando hay diferentes departamentos desde los que nacen las iniciativas. Desde Alén les ayudamos a definir los objetivos, a diseñar una hoja de ruta y a ejecutarla y monitorizarla para que se filtre en todas las áreas del negocio. Es decir, la semilla está ahí, pero todavía tenemos que trabajar a muchos niveles para que esa integración transversal sea efectiva.
¿Lo hacen de forma holística o existe todavía la percepción de la sostenibilidad como algo relacionado en exclusiva con el medio ambiente?
Muchas veces, por sensibilidad personal o por las operaciones de su cadena de valor, ya priorizan el impacto social o el impacto ambiental en su forma de entender la sostenibilidad. Existe todavía cierta incredulidad sobre las posibilidades de aunar competitividad y rendimiento económico e impacto social y ambiental; pero es verdad que, a medida que se va trabajando y se van dando visibilidad a las iniciativas y a sus resultados, va aumentando la ambición por un mayor impacto y más holístico.