“El eje de la ciencia y la empresa tiene cada vez mayor peso en la aproximación a los problemas sociales”
Diego Moñux Chércoles. Fundador y Socio-Director de la empresa Science & Innovation Link Office.
El módulo I+D+i y transferencia del Curso de Especialización en Responsabilidad e Innovación Social de la Cátedra Inditex-UDC fue abierto por Diego Moñux Chércoles, fundador y socio-director de la empresa Science & Innovation Link Office con una sesión titulada “Ciencia, tecnología e innovación social”.
El docente comenzó preguntando al alumnado sobre el concepto de innovación social y cómo la definirían. Entre todos, se llegó a la conclusión de que la innovación social tiene que ver con dar respuesta a problemas sociales, pero también a poner en marcha prácticas que se anticipen a la posible aparición de estos. No solamente hay que tener en cuenta los fines, sino también los medios utilizados, puesto que pueden traer consigo impactos negativos que disminuyan la innovación social. Se debatió, así mismo, si los negocios con la base de la pirámide son innovación social o no. El ponente mostró como, actualmente, el concepto de innovación se está estirando tanto que es complicado para los académicos definir particularmente lo que implica.
Antes de la Segunda Guerra Mundial, la ciencia descubría, la industria aplicaba y el hombre se adaptaba. A partir de la década de los noventa, la innovación tecnológica industrial se convierte en el motor económico, pero bajo un concepto muy lineal. Ya a partir del año 2000 la innovación no tecnológica adquiere más relevancia, también como proceso no lineal, introduciendo el concepto de innovación abierta y centrándola en el usuario. Comienza una etapa en la que, como explicó Moñux: “El eje de la ciencia y la empresa tiene cada vez mayor peso en la aproximación a los problemas sociales”. La innovación social entra en el ámbito de las agendas internacionales de desarrollo.
Surgen, según el Fundador de Science&Innovation Link Office, nuevos modelos de innovación social que tienen que ver con las ayudas al emprendimiento corporativo, el fomento del intraemprendimiento, premios de apoyo a emprendedores, etc. En España encontramos ejemplos en entidades como Repsol o Ferrovial. Además, el ponente quiso destacar las ciudades como protagonistas fundamentales en el fomento de la innovación, tanto en su gestión interna como en su rol de agente del sistema de I+D+i. Las ciudades han pasado de ser clientes a socios estratégicos en cuanto a innovación social; son aceleradoras de proyectos innovadores.
Durante la segunda parte de la sesión, se llevó a cabo un ejercicio práctico. El alumnado, dividido en grupos, preparó de manera previa a la clase diferentes casos relacionados con la innovación social, los cuales tuvieron que debatir para buscar soluciones y presentar ante sus compañeros y compañeras. Mientras que alguno de los grupos tuvo que tratar un caso en el que una consultora debía presentar un plan de Responsabilidad Social Corporativa a una entidad, otro, por ejemplo, trató el cómo presentar una propuesta de colaboración a una ONG desde una empresa privada.
Para finalizar, Moñux quiso diferenciar la i+D de la innovación. “Ni toda la innovación está basada en conocimiento de i+D, ni toda la i+D termina en innovación”, afirmó.
Úrsula Rey
Comunicadora audiovisual y alumna del Curso de Especialización en Responsabilidad e Innovación Social