Diego Monux Chércoles: «La innovación ha entrado en el terreno público, ha salido de la academia»

Socio director y cofundador de la empresa Science & Innovation Link Office (SILO).
“Ciencia, tecnología e innovación social. Perspectivas y casos prácticos”.

Diego Moñux es ingeniero industrial por la Universidad de Valladolid, Máster en Ciencia, Tecnología y Sociedad por la Universidad de Salamanca y Máster en Economía, Gestión de la Innovación y Política Tecnológica por la Universidad Politécnica de Madrid. Ha cursado diversos executive programs y ha publicado diversos trabajos y colabora con medios de comunicación. Trabajó como director adjunto del gabinete de la ministra de Ciencia e Innovación entre 2008 y 2011 y tiene una trayectoria interesante desplegando políticas públicas de innovación. En la actualidad es socio director y cofundador de la empresa Science & Innovation Link Office, una firma de referencia en innovación pública, colaboración público-privada y nuevos modelos de innovación empresarial. También forma parte del consejo asesor de la Estrategia España Nación Emprendedora de Presidencia del Gobierno.

La primera parte de esta última sesión ordinaria del posgrado consistió en debatir sobre los atributos de la innovación social. “Al final, de lo que se trata es de hablar de la innovación como un concepto compartido en diferentes ámbitos y en el debate público, ya que es un concepto de moda y expansivo”. Así empezaba Moñux la clase, afirmando que “la innovación ha entrado en el terreno público, ha salido de la academia”.

A través de varios ejemplos que demuestran que [la innovación] “es una palabra de moda, pero que parece obvio decir que vende en el discurso político”, llegamos a la conclusión de la importancia que tiene en la actualidad. “La manera de detectar por dónde va la conversación pública es mirar cómo se refleja en el mundo del marketing”, y por ello Moñux presentó diferentes anuncios de marcas tan variadas como HP, Accenture, Siemens o New Balance. En todas ellas aparecía el término y el ponente concluyó: “será que cuando un concepto es tan transversal nos apela a todos, ¿no?”.

Después de esta primera aproximación al término discutimos qué significa para nosotros, huyendo en un principio de las definiciones más formales. El debate venía inspirado por una frase de Robert Grimm y otros autores (2013) que afirma que les preocupa que el concepto se haya extendido en tantas direcciones que esté al borde del colapso. Salieron palabras como “cambio”, “necesidad”, “impacto en la comunidad”, “bienestar”, “colaboración” y “cocreación”, entre otras. Hablamos de poner las necesidades por delante y de tener en cuenta que es algo relacionado con un fin pero también con un proceso.

Moñux dice que no le gustan los anglicismos pero que haría una excepción con “wicked problems”, término que hace referencia a todos aquellos problemas en los que intervienen numerosos factores interdependientes que los hacen parecer imposibles de resolver. “Son problemas enrevesados, como la desigualdad o el cambio climático, que superan las capacidades de acción de una empresa o del sector público y la única manera de abordarlos es de una forma colaborativa, trabajando con el triángulo del sector público, entidades no lucrativas y la empresa privada”. “Donde interactúan todos ellos es quizás donde haya más espacio para innovar”, subrayó.

Tras hacer un “recorrido express” por la historia del concepto y ver su evolución, que pasó de ser una visión muy interna, cerrada y lineal a todo lo contrario, conocimos proyectos relacionados con la movilidad urbana como Smartiago, Smart city o Santander Smart City. “Identifican necesidades no resueltas e incorporan la idea de cocreación, incorporan a la ciudadanía que luego será la usuaria”, añadió.

Para terminar, trabajamos por equipos sobre experiencias que el ponente conoce bien: una consultora que quiere hacer una propuesta de RSC a “Supracafé”, una empresa del ámbito sanitario que quiere colaborar con “ISI Global”, otra de infraestructuras que quiere trabajar con ONGAWA y, por último, una consultora que tiene que hacer una propuesta al Ayuntamiento de Valencia para mejorar sus convocatorias de ayudas y de premios de innovación social. Tras trabajar sobre las preguntas, exponer y debatir en conjunto, ¿habremos resuelto los casos?

 

Laura Calvo González
Educadora social y alumna de la undécima edición del Curso de Especialización en Sostenibilidad e Innovación Social.