Adela Sobaler: «La sostenibilidad debe estar integrada en la estrategia de negocio»

Adela Sobaler. Jefa de equipo de varios proyectos de Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa de Deloitte España.

Las herramientas para realizar un buen reporting integrado de información financiera y no financiera en la empresa cobran cada vez mayor peso. Este es un tema que conocen bien en Deloitte y que Adela Sobaler, jefa de equipo de varios proyectos de Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa de la firma en España, ha explicado a los alumnos y alumnas del Curso de Especialización en Responsabilidad e Innovación Social 2016/2017 de la Cátedra Inditex-UDC de RS.

Cada vez existe una mayor demanda por parte de los grupos de interés de información transparente sobre el comportamiento y los planes de futuro de las empresas, sobre todo a raíz de la última crisis financiera que puso de manifiesto debilidades en la gestión, en el Gobierno Corporativo y en la información de las mismas. Ante esta situación, la experta indica que “no actuar significa quedarse atrás en mercados fuertemente competitivos”. El desarrollo de estándares de reporting de sostenibilidad y responsabilidad social ha ayudado a crear un mosaico que ha favorecido el desarrollo de estrategias e informes que aúnan lo financiero y lo no financiero. La evolución de estos informes desde la década de los 90 hasta la actualidad ha venido marcada por la duplicidad de documentación con repetición de contenidos, la mayor presión regulatoria y la adaptación a las necesidades de los grupos de interés.

La docente expuso la normativa y herramientas existentes en cuanto a información no financiera, entre las que destacan la Ley de Sociedades de Capital, la Directiva 2014/95/UE, la Guía sobre el Informe de Gestión y el Código de Buen Gobierno de la CNMV y los estándares de reporting no financiero. Dentro de estos últimos cabe señalar el GRI, IIRC, AA1000 Accountability, ISO26000, SASB, Pacto Mundial y Agenda de Desarrollo Sostenible 2030.

Las compañías tienen la necesidad de diferenciarse de la competencia, dar respuestas muy rápidas a los cambios de mercado y crear nuevas oportunidades. Es por ello que el informe integrado se convierte en un documento que resulta muy valioso. Si bien no existe un único acuerdo sobre la definición de este informe, según el Comité Internacional de Reporting Integrado (IIRC) es aquel que muestra los vínculos entre la estrategia de la organización, su gobierno y su rendimiento desde la perspectiva financiera y el contexto social, ambiental y económico en el que opera.

El informe integrado debe ser algo más que combinar el Informe Anual y la Memoria de RSC: “Es fundamental que ofrezca información relevante para los grupos de interés”, apunta Sobaler, y en este sentido puede ayudar a canalizar vías de diálogo sobre riesgos y oportunidades además de generar confianza hacia la compañía. Un factor de éxito clave para la implementación de este modelo de reporting es contar con la involucración de la alta dirección de la organización.

En la segunda parte de la sesión, Sobaler analizó la situación de las empresas del Ibex 35 en relación al reporting no financiero: a pesar de estar avanzando cada vez más en esta materia, se deben ir adaptando a las nuevas normativas y hacer un esfuerzo por recopilar los aspectos más relevantes de sus asuntos materiales.

 

Sandra López Salmonte.
Comunicadora audiovisual y alumna de la sexta edición del Curso de Especialización en Responsabilidad e Innovación Social.